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APRUEBA ASAMBLEA LEGISLATIVA CAMPAÑA DE DIFUSIÓN POR UNA BUENA ALIMENTACIÓN Y CONTRA LOS PRODUCTOS CHATARRA



20 de Enero de 2010

Boletín # 310

• La diputada Aleida Alavez Ruiz propuso la realización de la campaña Aprender a Comer es más Sano y Económico, ante los alarmantes índices de obesidad en los niños capitalinos

Ante el alarmante crecimiento de obesidad entre los niños de la Ciudad de México, que podría colocarlos entre los más afectados del mundo, la Asamblea Legislativa aprobó realizar la campaña de difusión Aprender a Comer es más Sano y Económico, al tiempo de exhortar a las administraciones federal de Educación en el Distrito Federal y a las autoridades locales a que apoyen la difusión masiva de dicha campaña.

El punto de acuerdo presentado por la diputada Aleida Alavez Ruiz, propone a la Administración Federal de Educación en la Ciudad de México, a las Jefaturas Delegacionales, a los diputados de esta V Legislatura y a las autoridades del Distrito Federal encargadas del transporte público, a que difundan la campaña “Aprender a Comer es más Sano y Económico”.

Lo anterior se realizaría en escuelas de nivel básico, transporte público concesionado, el Metro, unidades de RTP, tranvías, metrobús y los 66 módulos de atención ciudadana, con el fin de crear una cultura de la buena alimentación entre la población infantil y evitar que contraigan enfermedades que antes eran consideradas como de adultos, tales como la diabetes mielitus II.

Por lo anterior, la legisladora resaltó la urgente necesidad de atender el problema de la obesidad infantil, debido a que en los últimos 20 años, México ha presentado un incremento alarmante en el sobrepeso y obesidad entre la población, a tal grado que la Secretaría de salud la ha declarado como grave epidemia.

La legisladora explicó que este fenómeno es resultado de de lo que los expertos llaman “ambiente obesigénico”, que se presenta principalmente en las escuelas, según estudios del Instituto Nacional de Salud Pública. Agregó que los planteles se convierten, en este caso, en fábricas de obesos, ya que la obesidad y sobrepeso se presenta más entre niños de 5 a 11 años.

Y citó las siguientes cifras: entre 1999 y 2006, el crecimiento de la obesidad en niños de 5 a 11 años fue de casi 40%; entre 2006 y 2008, según la Encuesta de Salud en Escolares, y hubo un aumento adicional de entre 2 y 3 puntos porcentuales. Además, los niños de la Ciudad de México presentan uno de los mayores índices de sobrepeso y obesidad en el país, ubicándose por encima del 30%.

Este fenómeno es paralelo a los malos hábitos alimenticios, dijo, ya que entre 1988 y 2002, el consumo de refrescos aumentó 40% y el de frutas y verduras disminuyó 30%. De acuerdo con los productores de frijol, el consumo de este grano, complementario del maíz en la dieta tradicional, cayó 50%, mientras los mexicanos nos convertimos en los mayores consumidores de sopas instantáneas y refrescos embotellados, lo que nos convierte en la población que más calorías consume por persona en bebidas de este tipo.

Recordó que en 2008, la Secretaría de Salud presentó las Recomendaciones para la Población Mexicana de Bebidas para una Vida Saludable, que equivalen, en bebidas, a las recomendaciones del Plato del Bien Comer.

El fin que se perseguía es que la Secretaría de Educación Pública iniciara el retiro de estas bebidas de las escuelas como se ha hecho ya en varios países; al contrario, además de no atender la recomendación y declarar que no prohibiría la comida “chatarra” de las escuelas, participó activamente en el lanzamiento de programas de empresas refresqueras trasnacionales para incentivar el consumo de sus productos.

Denunció, asimismo, que este consumo genera para las empresas “un botín” de alrededor de 20 mil millones de pesos al año.

Por último, señaló que 18 congresos estatales han legislado para retirar la comida chatarra de las escuelas. Sin embargo, aún falta apoyar con más decisión la creación de una cultura de alimentación sana, particularmente con la infancia, sector más expuestos al consumo de este tipo de productos.

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